TOM TYKWER nace en
Wuppertal (
Alemania) en el año
1965.
Peter Pan fue probablemente la primera película que vio, y dice que la fantasía juvenil de crear un mundo mágico paralelo fue una inspiración ese día. El sentido soñador e infantil en
Peter Pan le fascinó, como hizo
Milagro en Milan de
Vittorio de Sica.
Otra experiencia cinematográfica importante fue viendo
King Kong (Tom Tykwer, con nueve años, descubre que el cine era artificial, hecho por los hombres). Esta película en particular marcó el principio de su cariño por el género del horror. Tykwer nombra también
La Novia de Frankenstein de
James Whales y
Halloween de
John Carpenter como algunos de estos primerizos hallazgos.
En este punto de la adolescencia, empieza a brillar su pasión desenfrenada por el cine. Para conseguir mejor acceso a las películas echó una mano en una pelíc
ula independiente, que le permitió saltarse las restricciones de edad.
Tykwer empezó haciendo películas en
Super 8 a la edad de once años, un ejercicio puramente fanático esencialmente destinado a imitar sus películas favoritas. Como él mismo admite, aburrió a sus sufridores amigos. Sin embargo, continuó trabajando en proyectos similares durante su paso por la escuela.
Quedó aún más impresionado en una visita a
Berlín, el aparente paraíso del cine. Cada noche, docenas de películas clásicas eran ofrecidas literalmente.
Tras graduarse en la escuela y enviar numerosas solicitudes sin éxito en prácticamente todas las escuelas de cine europeas, se mudó a Berlín y trabajó como proyeccionista. En 1987 se convirtá en el programador del ambicioso cine Movimiento y, al mismo tiempo, analizaba guiones para el departamento de historia y entrevistaba muchos de sus ídolos cinematográficos para archivos televisivos.
El deseo de hacer sus propias películas no tomó forma hasta que conoció al cineasta
Rosa von Praunheim, quien vigorosamente purgó sus fijaciones por el género, impulsándole a crear historias surgidas de sus experiencias personales. Por ejemplo, sugirió a Tykwer grabar discusiones con su actual novia y –de una forma exagerada – transformarlas en un cortometraje. Because (
1990) fue proyectado en el
Hof Film Festival, que, para Tykwer, era en ese momento una verdadera meca de la cultura cinematográfica. Because fue recibido por el público con risas e identificación compasiva, una reacción totalmente inesperada que marcó al joven director.
Para comunicar intensas verdades personales, pero a la vez desafiar la experimentación formal – que era el modo en el que imaginaba que podía progresar – nació otro cortometraje, Epilog (1992), que hundió a Tykwer en una deuda financiera, pero le permitió a él y a su colega Frank Griebe (cámara) ganar experiencia.
Pero volvamos al
Hof Film Festival del
1990, porqué Tykwer conoció allí a
Stefan Arndt, que también llevaba un cine en Berlín. Su idea de hacer algo en tándem finalmente dio sus frutos cuando los productores de Kleines Fernsehspiel en la televisión alemana ZDF, dieron a Tykwer la oportunidad de rodar su guión
Deadly Maria (Mortalmente María), su primer largometraje. En ella, las influencias del cine de terror que cosechó en su juventud son muy evidentes, pero al final se convierte en un melodrama. La historia (extravagante e inusual) y su forma visual (muy dinámica), agitaron la industria de un modo muy inusual para ser un drama televisivo, consiguiendo un modesto estreno en salas. Sin embargo el éxito fue rotundo. Más de cien festivales proyectaron la película e incluso cines de algunos países como
España,
Holanda,
Suiza,
Noruega y
Brazil. La reacción del espectador a la primera película televisiva alemana fue impasible (turbadora y emotiva), confirmando el impacto que
Deadly Maria había tenido en los festivles.
Junto a
Stefan Arndt,
Wolfgang Becker y
Dani Levy, Tykwer fundó la productora
X Filme Creative Pool en
1994. La idea era crear un colectivo de cineastas con el máximo control creativo sobre sus producciones, garantizando, eso si, cierta cantidad de estructura y seguridad financiera. Junto a Wolfgang Becker, Tykwer escribió el guión de
Life is All You Get (La Vida en Obras), al mismo tiempo que trabajaba en su segunda película
Winter Sleepers (1996/97). Esta vez claramente mayor y mucho más compleja que
Deadly Maria. El rodaje en las montañas de Berchtesgaden fue el primer gran reto para Tykwer y su nueva compañía. Las cualidades hipnóticas de la película, típicas del director, llamaron la atención del público juvenil. Se convirtió también en una pieza memorable en los festivales.
Lo único, por entonces, que no iba tan bien en
X Filme, era el lado financiero. Un nuevo proyecto tenía que gestarse. Tykwer revisó una idea que le fascinó en
Because: la relación entre coincidencia y destino. Una pequeña alteración en el desarrollo de un día puede tener enormes consecuencias, incluso marcar la diferencia entre la vida y la muerte. El resultado fue
Run Lola Run (Corre, Lola, Corre), la película más exitosa en ese
1998.
La imagen de una Franka Potente pelirroja corriendo las calles de Berlín atrapó al público internacional. Triunfó en el Venice Film Festival, que le dio reputación a nivel mundial, ganando abundantes galardones. Recaudó más de siete millones de dólares en Estados Unidos y, aún más significante, Tykwer fue aclamado por actores y directores de Hollywood, convirtiéndose en un respetable autor con el que poder trabajar algún día.
Para Tykwer ese éxito paso relativamente desapercibido. En ese momento estaba preparando su siguiente proyecto con Franka Potente, quien se había convertido en su novia. No había nombres de famosos en The Princess and the Warrior
La Princesa y el Guerrero, por no hablar de la localización (Wuppertal, el pueblo natal del director), que no era muy espectacular. Sin embargo, allí, el director estaba en su elemento, finalmente capaz de hablar (sin problemas financieros) sobre el tema que siempre le había intrigado: El poder instintivo del amor para superar los obstáculos externos y el dolor emocional.
Se acababa de fundar la
X Verleih distribution company, que entregó la película a los cines, permitiendo a Tykwer y a sus colegas tener el control absoluto de la distribución. El film fue proyectado en el Venice Film Festival y en más de 30 países. En 2001 ganó una Lola de plata, el premio alemán a la mejor película. Tykwer comenta que
La Princesa y el Guerrero fue su película más exitosa hasta la fecha (épica e intimista, personal y universal).
Casi inmediatamente Tykwer se sumergió en un nuevo proyecto. La firma americana Miramax, especialistas en películas premiadas en los oscars, sugirieron un guión de Krysztof Kieslowski,
Heaven (En el Cielo), para ser filmado en inglés por actores de habla inglesa. Tykwer vio sus temas preferentes como la culpabilidad y el perdón en el guión del polaco, en particular la idea de que dos enamorados sean capaces de salvarse mutuamente y así convertirse en uno. Los interpretes fueron Cate Blanchett y Giovanni Ribisi y fue rodada en Turín y Tuscany. Heaven abrió el festival internacional de Berlín en Febrero de 2002, y fue su película más radical hasta el momento. Se estrenó prácticamente en todos los países del mundo y también ganó una Lola de plata.
Sin embargo, en ese momento, Tykwer estaba evidenciando cierto agotamiento creativo, exacerbado por una crisis personal. Se veía a sí mismo al final de un periodo creativo, y estaba confuso, sin saber como proceder.
Recibió la oferta de una compañía francesa para hacer un film de diez minutos para un proyecto coral llamado Paris, Je T'aime. La película se tenía que hacer en uno de los veinte distritos de París, y tenía que ser una historia de amor. Aun así, Tykwer quiso hacer una película sobre el final de una relación (un tema autobiográfico en ese punto de su vida). En agosto de 2002, sin apenas pre-producirlo (por falta de tiempo), hizo
True con Natalie Portman, Melchior Beslon (Otto en su película
La Princesa y el Guerrero), y un equipo reducido, filmando rápidamente en las calles y los cafés de Paris. Una historia de amor es contada a modo de flash-back con una intensa ráfaga de imágenes que Tykwer encontró personalmente liberadoras.
TRUE fue premiada en el festival de Berlín en
2004 en la competición de cortometrajes. Con esta pequeña película Tykwer alcanzó el resultado utópico que siempre había esperado ver en el cine. Tal vez por eso le dio un final feliz...
Se sintió entonces preparado para embarcarse en el reto más grande de su carrera: filmar el Bestseller de Patrick Süskind
Perfume: Story of a Murderer (
El Perfume: Historia de un Asesino), junto a un nuevo compañero, el veterano productor Bernd Eichinger.
Tykwer encontró en El Perfume la historia de un personaje con un conflicto interior profundo, que intenta buscar el reconocimiento a toda costa. Eso le motivó a hacer este proyecto, ya que sintió cierto paralelismo con su crisis personal.
Con una larga pre-producción, marcada sobre todo por la interminable búsqueda del actor que interpretara a su protagonista, Jean Baptiste Grenouille (que finalmente resultó ser el joven Ben Whishaw), El Perfume fue rodada en Alemania, Francia y España en 2005, en co-producción con estos tres países. Se estrenó en 2006 en Europa y Estado
s Unidos.
Tras El Perfume, no se sabe qué rumbo tomará la carrera de este director alemán.