AMELÍ: ¡EL JUEGO SE LLAMA AMOR! :Es una excelente ensalada de los sentidos. Asumo que soy una romántica, y esta película me hizo llorar, me hizo reír, me hizo pensar, me hizo soñar en definitiva me hizo sentir, Es una película que podría definirla como una poesía del cine. Y este conjunto de emociones en los tiempos que corren donde debemos hacer de tripas corazón en múltiples ocasiones para lidiar con los problemas de la vida; cosas como esta se agradecen, Porque te acarician el alma.
Amelie si te abrís te va a cambiar la vida que rezaba la promoción...
Plagada de imágenes que no les hace falta más que el "Pause" y quedarse ahí. Un ejemplo al azar de las maravillosas escenas de esta película, hace un ratito recordaba al hombre de cristal intentando conseguir la expresión de la cara de una muchacha en un cuadro de una fiesta campestre de Renoir, a eso dedicaba su vida, a observar el movimiento de su calle desde una ventana e intentar...descubrir la particular transformación del ser humano, para conseguir ese anhelado rictus de sencillez, de ternura, de buena fe...
El señor de cristal, lo mira con ojos de incredulidad, de lucidez, de inspiración... antes de observar como un negro cojo se marca un baile sambito, simplemente porque le viene en gana... Frágil como el hielo de un glaciar inerte y desolado.
Para nada me parece una historia sensiblera, si crees en el ser humano, si piensas que haciendo el bien a los demás conseguirás ser mejor persona, si realmente te implicas en dar lo mejor de vos, la suerte en un ligero balanceo de la casuística te puede rozar...
Amelie, duendecillo fundido en verde y rojo, se obsesiona con esas cosas que tienen el intrínseco valor de la verdad, y nos enseña el camino a seguir, démonos la oportunidad de creer que no es utopía pura y dura, sino una última oportunidad que los dioses han tenido a bien concedernos... Amelie bondadosa, también nos muestra su vena oscura tras su deliciosa sonrisa.
No quiero excederme con mi opinión porque se me agolpan las palabras en la cabeza, me impulsan los dedos a seguir que quieren tocar y llega a donde está blando, sin defensas una y me desborda el corazón de ganas de creer, en todos, en mí...en la magia
Le gusta recoger piedras redondas en la calle y después lanzarlas a los arroyos del Sena y hacerlas brincar, mandar a su gnomo de jardín a viajes exóticos, también le gusta sumergir la mano en los sacos de legumbres en las tiendas de alimentación...
Le gusta mojarse cuando llueve, abrazarse a su mujer por las noches e intentar arrancarle una sonrisa, también le gusta la punta tostadita de las barras de pan recién hecho... Cosas sencillas amigos, que son las que realmente llenan los vacíos que el tiempo, inexorable tic-tac, se encarga de profundizar...
QUE EL CORAZÓN NO PASE DE MODA, QUE ROMANTICISMO VUELA, QUE BUSQUEMOS, O ESPERO Y QUE A TODOS NOS LLEGUE ESTO
FENOMENOS URBANOS: UN "OFICIO" QUE VIENE DEL EXTERIOR Y AHORA CRECE EN BUENOS AIRES.
Cool hunters, los jóvenes que andan por la Ciudad cazando tendencias
Trabajan para agencias de publicidad o en empresas de productos de consumo masivo. Y recorren las calles detectando comportamientos. Con esos datos se puede definir una campaña o nuevos negocios.
Cámara digital en mano, anotador y birome, una analista de tendencias urbanas registra sus movimientos y concluye. "Hay una vuelta a la naturaleza, con productos que apelan a los sentidos y alimentos funcionales que benefician a la salud. Comer rico, sano y rápido es lo que se busca", define la Licenciada Mariela Mociulsky, psicóloga con estudios de posgrado en investigación de mercado al frente del Área de Tendencias de la consultora CCR. Una de sus tareas: cazar modas urbanas.
Con el radar alerta, los cool hunters —cazadores de tendencias— se multiplican por la Ciudad rastreando hábitos de consumo y estados de ánimo en plazas, bares, recitales, tiendas de diseño, peloteros y canchas de fútbol. Relevan información valiosa: con estas percepciones, las empresas elaboran campañas publicitarias y definen pautas de consumo, entre otras cosas.
El término aún suena novedoso en Buenos Aires, aunque en Europa y Estados Unidos se escucha fuerte desde hace tiempo. Según Richard Welch, analista de tendencias culturales y director general
de Crystal —una empresa que recopila la información de 35 ciudades del mundo a través de 180 cool hunters—, Buenos Aires está en la categoría A, que incluye a "los lugares más influyentes de acuerdo
a su producción de tendencia o cultura global". Comparte el podio junto a Berlín, Nueva York, Tokio y Londres. Le siguen, en la categoría B, Caracas, Miami y Roma. Y en la Cse ubica, entre otras, Punta del Este.
Jueves por la tarde, Galería Ruth Benzacar, Florida al 1000. Bianca Monti y María Lucila D'Amico recorren la muestra de fotos de Marcos López. Se detienen frente a una mujer carnicera, con su
delantal enchastrado de sangre y un cuchillo en la mano. "Las barreras entre lo femenino y lo
masculino se están corriendo, la tendencia es que se abre el juego, que las mujeres también pueden estar en el lugar de los hombres", ensayan, con sus 21 años.
Estudian publicidad en la Escuela Superior de Creativos Publicitarios, que este año estrenó una
alianza con CCR para realizar 25 pasantías. "Queremos formar un equipo de jóvenes que pueda
salir a pescar los códigos de la Ciudad y que le puedan dar sentido a lo que ven", señala Mociulsky. "Para mí es natural analizar y procesar la información. Ojalá se convierta en un oficio", sueña D'Amico, jeans de tiro bajo, zapatillas de marca, remeras superpuestas. En "La Escuelita", así se la conoce entre los publicitarios, la matrícula aumentó un 17% en 2005. "El descubrimiento, la anticipación y el análisis
de tendencias tendrán un espacio exclusivo a partir de 2006 en materias específicas", apunta Adriana Amante, la directora.
La formación de estos recolectores de usos y costumbres también es materia de estudio en la Universidad de Palermo. "En mi cátedra de Diseño de Indumentaria, establecemos sistemas de relevamiento donde los alumnos investigan tribus urbanas consolidadas, emergentes y latentes para luego armar su propia colección", explica Gustavo Lento.
Nestlé, Fargo, Coca-Cola, Sprite, Nobleza Piccardo, Lucky Strike, MTV y Levi's, entre otras, contratan los servicios de los cool hunter. ¿De dónde sale el nombre? Lo creó la revista New Yorker en 1997 para describir el trabajo de Dee Dee Gordon, la pionera en esta especialización, que cruzaba todos los datos obtenidos y los volcaba en su agencia de tendencias Look-Look. Aunque cool en inglés significa "calma", refiere a una expresión cultural ligada a la raza negra como forma de autoexpresión.
¿En qué se traducen estas manifestaciones callejeras? "Se inspira diseño, contenidos de publicidades o consumos culturales, desarrollo de nuevos productos y mayor acercamiento a los segmentos a los que se dirigen las empresas, que cada vez están más interesadas en tener una guía de la sociedad argentina para accionar programas de responsabilidad social. Por eso no nos quedamos sólo en el retrato de los segmentos con poder adquisitivo. Estamos iniciando un curso de cool hunters para poblaciones de bajos recursos", apunta Mociulsky (ver recuadro).
La agencia de publicidad Young & Rubicam suele apelar a estos informes para armar su propia base
de datos y "utilizarla para todas las cuentas", comenta Clarisa Caraballo, supervisora del Departamento de Marketing. Los escenarios porteños que marcan tendencia, como lanzamientos, eventos, desfiles y muestras de arte también son observados por el equipo de periodistas, sociólogos, diseñadores y músicos que reportan para la agencia Ogilvy. "El espíritu es recorrer circuitos tradicionales y no tradicionales", dice Mariana Bricchetto, directora de Planning Argentina.
Una de las pioneras que rastrea tendencias en las calles porteñas es Kiwi Sainz. Entre sus últimas pesquisas, detectó para una marca de helados "la importancia que tenía para los chicos parar en el quiosco, como un mundo de socialización". La caída del consumo de alcohol en Capital, luego de la ley seca, la moda de las bebidas energizantes en los boliches y hasta la actitud de los alumnos del Buenos Aires y el Pellegrini también es materia de estudio de estos analistas.
Jueves por la noche. Otra vez Florida. Bares, shopping, espectáculos en la calle. Las antenas de las cool se orientan hacia una perfumería que promociona la última fragancia de Valentino con una modelo seidesnuda soplando plumas rojas dentro de la vidriera. Concentrada en su baile sensual, quizá nunca se entere de que se convertirá en la musa inspiradora de una nueva forma de comunicar productos, ideas, conceptos....CAMBIOS